domingo, 24 de enero de 2010

Hijos.





Comentaba hoy con un gran amigo (con el que fuimos, ladies' inclusive, a presenciar una chinga más del H. Monarcas Morelia aka "El Papi de las águilas") sobre la verdadera razón para que las personas sigan "haciéndole gordo el caldo" a un equipo tan nefasto, mediocre y patético como lo es el américa. No llegamos a una conclusión real, pero sí logramos plantear algunas dudas un poco más específicas.

Es increíble que abunde tanta gente que no tenga la más mínima idea de lo que es el fútbol, ya que el hecho de apoyar a un equipo que ha demostrado tantísimas veces la falta de profesionalismo y el engaño como bandera para ganar de forma dudosa a toda costa, es simplemente inadmisible para una persona que presuma tener dos dedos de frente. Pero bueno.

Ahora, existen algunas generaciones, 25+ en sí, que se pudiera hasta cierto punto entender el americanismo que profesan. Aquel equipo tramposo de los ochentas (Sí, el 88 sigue en deuda) desplegaba un futbol mucho mejor al actual; era realmente un equipo odioso PERO contaba con los suficientes iconos y tamaños para lograr (en muchas veces, insisto, de manera tramposa), los objetivos que se iban trazando en aquellos años. El último américa con un dejo de equipo respetable fue aquel famoso creado por Beenhakker, estamos hablando de los primeros años de los noventa. Punto. La duda es.... ¿Y LOS DEMÁS? Digo, si una generación ya está podrida pues ni modo, se entiende,pero las nuevas generaciones a qué deben su fanatismo? Mercadotecnia, Baja Autoestima o Pendejés? Creo firmemente que es una combinación de estas tres, en orden creciente. Es imposible pensar o siquiera imaginar que estos nuevos aficionadetes basan sus gustos por los logros que ha conseguido este equipo; o por el estilo de juego que profesa, o por la nobleza y garra que tienen su jugadores; por favor, si hay un equipo que demuestre la grave mediocridad del fútbol azteca, es sin duda, el américa. Como quiera que sea, los mismos americanistas siempre se han encargado (Gracias Dios!) de demostrar lo necios que son, así es que espero mis 3 pomos ganados en la siguiente semana. Gracias.


Hoy fuimos a ver al Morelia. Valió mucho la pena asistir a un baile más que el equipo provee al odiado rival, que ya es el más socorrido de nuestros hijos. Como quiera que sea, Morelia ganó, quizá con más corazón y entrega que con un orden claro en el esquema táctico, pero al final este tipo de partidos son de riñones y Morelia demostró que la camiseta se siente más en este lado del país. Bien por Morelia, confieso que en algún momento tardío del partido pensé que el partido estaba para el empate pero al final la garra y la fuerza se impuso a la marrullería y al engaño, por lo que sólo me resta agradecer por estos buenos (y ya muy, muy frecuentes) momentos y esperar que el equipo siga viento en popa, como ha demostrado ir en los últimos tiempos.
P.D. ARDO en deseos de saber ahora cuál será el pretexto americanista. MUERO por saberlo YA!

martes, 19 de enero de 2010

Arándanos


Claro que quiero ir. Pero por supuesto. El hecho de imaginarme a Lola O'Riordan vibrar con cada acorde de Dreams, ó el eco de la batería tan característica de ellos, hace que evoque en mi memoria tantos recuerdos, tantas vivencias en las cuales me han acompañado The Cranberries.


Discutía con mi hermana sobre cuál era la canción que los había catapultado hacia la fama. Ella sugiere que Promises, pero yo considero que su primer gran hit mundial fué Zombie, seguida de Ode To My Family. Se consagraron con Salvation y Free to Decide, y de ahí una larga cadena de éxitos que terminó en una inconcebible (y temprana, a mi parecer) separación que aún deja muchos huecos por llenar.


Pude haber asistido al Auditorio Benito Juárez en Guadalajara hace ya unos ocho años. No entré. Quizá por capricho, quizá por casualidad, pero siempre pensé que podría ir a verlos alguna otra vez, de algún otro modo. No fue así. Se separaron y empecé a resignarme y a rumiar mi derrota, al fin y al cabo tendría toda una vida para confortarme. Pero una vez más, vislumbré la oportunidad de verlos en vivo y en directo: La gira mundial que están realizando con motivo de su reencuentro, con un pequeño detalle: Ya NO hay boletos. Creo que sería una puñalada trapera del destino el no poder ir a verlos, el no cantar con ellos y el no poder recordar tanto de mí en dos horas en un concierto. Se me pasó la fecha, la verdad supuse que no se llenaría (mal informado pensé que sería en el Foro Sol), y ahora tengo sólo un resquicio de esperanza, esperanza que me da miedo el simple hecho de pensar que no pueda llegar a realizarse. Sólo por eso, espero, espero, espero...


Por ahí ví el setlist del concierto. Está Pocamadre. Me encantó que comiencen con How, y en general todas las demás son joyitas que seguramente harán un conciertazo. Espero ser fiel testigo de eso.




La que más me gusta? Ridiculous Thoughts, es como mi canción. De hecho, es la canción que alcancé a escuchar de lejos en aquel concierto en GDL, es la canción que ha albergado la fe diaria de algún día poder volverla a escuchar, en vivo.




Sólo espero que no sean sólo Promesas. Aunque estos parezcan Pensamientos Ridículos.